Qué es la betaespera y qué recomendaciones seguir tras un test de embarazo positivo

La mayoría de los pacientes que se someten a un tratamiento de Reproducción Asistida tienen que superar la conocida “betaespera”. Su nombre hace referencia al período de tiempo tras la finalización de un tratamiento de fertilidad y el día en que se hace la prueba de embarazo. Son días en los que a los pacientes les surgen muchísimas dudas.

En este artículo, los expertos de IVFforYOU te explicarán en qué consiste la betaespera, cuáles son los síntomas que generalmente se presentan y, en caso de que tu test muestre un resultado positivo, qué tipos de embarazos existen.

¿Qué es la betaespera?

Se le llama betaespera al período de tiempo que transcurre entre el que una paciente finaliza su ciclo de Reproducción Asistida (Inseminación Artificial o transferencia embrionaria tras una Fecundación In Vitro) y el día en que efectúa el test de embarazo.

Este periodo se llama así porque en la prueba de embarazo se analizan los valores de la hormona beta-hCG, la cual es liberada por el embrión tras la implantación. A medida que el embrión va creciendo, también lo hacen los niveles de esta hormona, hasta el tercer mes de embarazo.

La betaespera tiene una duración de aproximadamente 15 días, ya que, tras ese período, los niveles de la hormona beta-hCG son lo suficientemente altos para detectarla y confirmar el embarazo.

Síntomas de la betaespera

Como solo transcurren algunos días desde la finalización del tratamiento de Reproducción Asistida hasta el día de la prueba, no es común que una paciente tenga síntomas de embarazo durante la betaespera.

Principalmente, se habla de síntomas en la betaespera para hacer referencia a los posibles efectos secundarios de los fármacos utilizados para la estimulación ovárica, que buscan aumentar el número de óvulos de buena calidad para fecundar, o de la medicación empleada para preparar el endometrio, en el caso de tratamientos con óvulos u embriones donados.

La estimulación ovárica produce algunos síntomas que son muy frecuentes en las mujeres, por ejemplo:

– Hinchazón abdominal

– Pesadez en las piernas

– Cambios de humor

– Sensación de presión en los ovarios

– Dolor lumbar

– Posible ligero sangrado

– Jaquecas

– Cansancio

– Gases

Durante la betaespera es normal tener la sensación de que puede llegar la menstruación, ya que uno de los síntomas frecuentes es tener sangrados ligeros o manchados de color marrón. Si experimentas sangrados abundantes, es mejor contactar con tu equipo médico a título preventivo.

Esto es normal, ya que cada cuerpo es único y las reacciones son diferentes frente a los tratamientos hormonales.

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Consejos para tu betaespera

Sabemos que estos 15 días pueden ser muy abrumadores y es normal que tengas muchísimas preguntas sobre lo que se puede o no hacer.

Por ello, en IVFforYOU hemos recopilado algunas respuestas y consejos que ofrecemos recurrentemente a nuestras pacientes, para que puedan vivir más tranquilas su betaespera.

– El primer día tras la inseminación es preferible no hacer grandes esfuerzos ni cargar peso.

– Es normal tener algunos síntomas por la estimulación ovárica, no te preocupes en extremo.

– Apóyate en tu círculo cercano y rodéate de amigos, familiares o pareja.

– Es recomendable no fumar ni beber, ya que existe el riesgo de producir trombos.

– Mantén una alimentación normal y buena hidratación. Te recomendamos especialmente la ingesta de fibra para favorecer el tránsito intestinal.

– Puedes hacer deportes sin problema, sin embargo, es preferible evitar deportes de alta intensidad o de contacto.

– Para controlar el nerviosismo, te recomendamos hacer yoga y meditación; estas técnicas ayudan mucho a los pacientes a controlar la respiración y sus pensamientos.

– No recomendamos hacer ningún test de embarazo casero antes de que finalice la betaespera.

Resultado positivo tras la betaespera: qué tipos de embarazos existen

Si tras finalizar la betaespera, tu médico te confirma que el resultado de tu test es positivo, ¡enhorabuena!, inicias una de las etapas más mágicas de la vida: el embarazo.

Existen muchos tipos de embarazos, y cada uno de ellos lleva asociados síntomas y recomendaciones específicas. Sin embargo, ¡no te alarmes! Muchos son comunes y no suponen ningún tipo de riesgo para ti o tu bebé; lo más importante es que tu embarazo esté controlado periódicamente por tu equipo médico para evitar cualquier complicación.

Para que tengas más información a tu disposición, te explicamos cuáles son los tipos de embarazos más comunes que pueden experimentar las mujeres.

Tal como dice su nombre, este tipo de embarazo es el que se desarrolla en el interior del útero, y es el más frecuente y normal en una mujer. 

En total dura aproximadamente entre 40 y 42 semanas desde la fecundación del óvulo.

Dentro de los embarazos intrauterinos, también se incluyen los embarazos gemelares o múltiples. Con los tratamientos de Reproducción Asistida es un poco más común y posible tener este tipo de embarazos. Sin embargo, la estadística no es muy alta: en IVFforYOU transferimos en un 90% de los casos un único embrión para evitarlos al máximo.

Los embarazos ectópicos, o también conocidos como embarazos extrauterinos, son aquellos en los que el óvulo se desarrolla fuera del útero.

Este tipo de embarazos se consideran de riesgo para la mujer, ya que, lamentablemente, en estos casos el feto no puede sobrevivir y, si no se interrumpe a tiempo, se puede poner en riesgo la vida de la mujer.

Debido a que en estos casos la fecundación del óvulo se realiza fuera del útero, el feto no tiene los recursos propicios para desarrollarse y mantenerse con vida.

Generalmente, este tipo de embarazo se detecta en las primeras semanas, específicamente entre la semana 6 y 16. Para diagnosticarlo, el equipo médico lo identifica mediante las ecografías o análisis de sangre que te efectuarán recurrentemente a lo largo de tu embarazo.

De manera anómala, también existen mujeres que desarrollan embarazos molares. Este tipo de embarazo es una complicación originada por el crecimiento anormal de las células que forman de la placenta.

Este es uno de los embarazos más riesgosos para la madre, ya que se considera como un tumor no cancerígeno que se desarrolla en el útero.

Los embarazos molares son inviables, ya que el embrión no llegó a desarrollarse o bien en la mayoría de los casos nunca existió. Por esta razón, apenas se detecta este tipo de embarazo, se toma la decisión medica de interrumpirlo.    

Las probabilidades de desarrollar un embarazo molar son estadísticamente muy bajas, ya que solo afectan a uno de cada 1.500 embarazos.

Lo más importante para que desarrolles un buen embarazo es mantener un control periódico con tu equipo médico; llevar una alimentación equilibrada y nutritiva, y rodearte de un ambiente tranquilo y positivo.

Si tienes cualquier consulta referida a los diferentes tratamientos de Reproducción Asistida, a la betaespera o al desarrollo de tu embarazo, en IVFforYOU estaremos encantados en apoyarte y resolver tus dudas.

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